El presidente egipto, Abdelfatá al Sisi, ha celebrado este viernes el primer aniversario del inicio de las protestas que acabaron con la presidencia de Mohamed Mursi, de los Hermanos Musulmanes, el 30 de junio de 2013 y ha recordado que, gracias a estos acontecimientos, "Egipto protegió al arabismo y preservó el Islam", así como la "unidad de sus gentes". El propio Al Sisi lideró el golpe de Estado en el que fue derrocado Mursi. El Gobierno instalado por el Ejército desató entonces una ola de represión que se saldó con más de un millar de muertos y cientos de dirigentes islamistas detenidos. En su discurso, Al Sisi ha prometido seguir protegiendo a la región de los "extremistas" que "intentan difamar el Islam relacionándolo con la violencia y el terrorismo". También ha alertado del peligro del terrorismo que va "contra la voluntad de los egipcios y sus esperanzas", según ha informado el periódico egipcio 'Al Ahram'.
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